A LA VENTA MI ÚLTIMA NOVELA, LA CASONA DEL INDIANO
EN BREVE SALDRÁ PUBLICADO MI SEGUNDO POEMARIO TITULADO ESOS DÍAS AZULES

lunes, 29 de julio de 2019

Reseña en el periódico digital Irreverentes.org

Otra reseña publicada en el periódico digital Irreverentes.org:

https://periodicoirreverentes.org/2019/07/29/un-hilo-de-historias-fantasticas/

sábado, 27 de julio de 2019

Entrevista a Elaine Vilar Madruga

Una entrevista que hice a la escritora cubana Elaine Vilar Madruga aparece en la revista digital Supraversum:

http://supraversum.com/entrevista-con-elaine-vilar-madruga/?preview=true&_thumbnail_id=752

lunes, 15 de julio de 2019

Relato: Camisas pardas, corazones negros


CAMISAS PARDAS, CORAZONES NEGROS


Llegaron desde la oscuridad, con sus camisas pardas ocultas tras la chaqueta y la corbata. Vinieron de nuevo de entre las tinieblas, trayendo en sus alforjas los mismos odios, la ira contenida, los pájaros de la muerte.
            Millones de voces muertas lloraron en el silencio del olvido. “No existimos jamás”, murmuraron con sus bocas cerradas, embutidos en sus trajes rayados de blanco y azul. Envueltos por el mismo gas que acabó con ellos, consumidos por las mismas llamas de los hornos que los convirtieron en polvo, los muertos olvidados lloran con ojos ciegos.

            Sobre una fosa común alguien ha puesto una rosa. El nieto de aquel hombre asesinado por ser hombre, abuelo ahora a su vez, sabe que “el trabajo no hace libre a nadie”, y que los látigos y las pistolas nunca harán mejor a la humanidad. Pero las camisas pardas no entienden de inteligencias, abominan de la palabra “cultura” y enarbolan banderas negras.
            ¿Dónde estás, abuelo? Las alambradas de púas no responden, y vibran un breve instante al compás del viento. ¿Qué pecado cometiste? Los barracones, con sus puertas abiertas que muestran camastros vacíos, no responden. ¿Por qué lo hicieron? Las chimeneas de los hornos crematorios, ahora apagadas, parecen querer decir, con sus dedos de cemento señalando al cielo, que quizá allí arriba tampoco lo sepan.
            El viento arrastra la rosa y la introduce, paradojas del destino, en la boca abierta de uno de los abandonados hornos.

Francisco J. Segovia ©Todos los derechos

lunes, 8 de julio de 2019

sábado, 6 de julio de 2019

Relato: Orgasmo infinito


ORGASMO INFINITO

            Lo vio morir ante ella. El hombre se retorció por el suelo entre espasmos de dolor. Después de unos segundos infinitos sus movimientos cesaron. La mujer iba a acercarse pero algo en el cuerpo del hombre desnudo e inerte la hizo detenerse. El cadáver se contrajo, los músculos de todo el cuerpo perdieron su consistencia, como si se hubiesen convertido en pura gelatina y, de golpe, el pene flácido del muerto comenzó a arrojar esperma.

            Lejos de cesar a los seis o siete segundos, y para asombro de la mujer, el apéndice sexual siguió esparciendo secreción de las glándulas genitales del varón caído, y cubrió su abdomen primero, y después su pecho. Luego, y en una suerte de continuidad nunca vista, el líquido blancuzco se esparció, arrastrándose de forma casi consciente, por las piernas y la cabeza del cadáver. Ante una mezcla de estupefacción, horror y asco crecientes, la mujer fue testigo de la “momificación” del fallecido con su propio semen.

            Unos minutos después, seca la superficie gelatinosa con el contacto del aire, ésta empezó a resquebrajarse. La mujer reprimió un grito. Un brazo desnudo sacudió el aire, ya libre de su mortaja. Poco después todo el cuerpo del hombre estaba fuera, desnudo y libre. Giró la cabeza entonces y miró la figura femenina que lo contemplaba absorta. Sonrió y le tendió una mano abierta. Ella vio en su mirada la diferencia de la metamorfosis, y en su bajo vientre una falla que no le pareció tan importante. Se acercó a Él y le tomó la mano: la sintió caliente, viva, sincera y distinta. Con una diferencia sutil, desconocida, pero tranquilizadora.

            Se alejaron de allí caminando despacio, y dejaron atrás la carcasa vacía de un orgasmo infinito, y un pequeño y despreciable objeto alargado que aún escupía -vómito de agonía final- un poco de semen aguado.

Francisco J. Segovia ©Todos los derechos

martes, 2 de julio de 2019

Artículo en la revista digital Teoría Ómicron

Un artículo mío sobre George Romero y su cine, aparece publicado en el número de junio de la revista digital Teoría Ómicron:

https://teoriaomicron.com/2019/06/29/histomicrongeorge-romero-la-epica-de-los-zombies/

lunes, 1 de julio de 2019

Reseña en el periódico digital Irreverentes.org

Reseña en el periódico digital Irreverentes de Sonata de mujer, de Eduardo Moreno Alarcón:

https://periodicoirreverentes.org/2019/07/01/una-novela-en-la-que-se-escucha-la-musica/