A TI, UFANO PERFECTO
Miras de reojo y con rabia,
murmuras palabras de odio,
hablas de males inventados,
gritas maldiciones aprehendidas,
golpeas protegido por la noche,
bebes la sangre de tus víctimas,
tú, ufano perfecto
que al diferente desprecias.
No eres mejor que el perro
ladrando al vacío,
ni tu raza heredará un futuro
que no merece,
ufano perfecto,
perfecto ignorante.
Porque no eres tan puro
como el aire de las tierras inhóspitas,
donde pervive el campesino
y crecen las razas endurecidas
de trabajo y penuria.
Ni eres tan antiguo
como las estatuas que crecen
en los páramos ya abandonados,
creadas por hombres y mujeres
hace más tiempo del que puedes
reconocer.
Tampoco te sobra el dinero,
tus riquezas materiales son escoria
en los pueblos del norte,
y tu cultura, ufano perfecto,
perfecto ignorante,
no más poderosa que la que acaeció
en oriente,
mucho antes de que tu raza
viniese al mundo.
Descansa en tus gritos,
cesa tus golpes,
calla tus brutales palabras
y destiérrate,
de una vez y para siempre,
o mézclate y hazte crisol,
ufano perfecto,
perfecto ignorante.
Francisco J. Segovia©Todos los derechos
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1 comentario:
Un poema de profunda sabiduria y magistral composición. Un goce encontrar poemas inteligentes.
Un abrazo.
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