CONFESIÓN
Tengo que confesarte una cosa, querido: hace una semana que fallecí.
RENCOR
Treinta años esperando desde que me asesinaste. Ahora, que has muerto, desgarraré tu alma corrompida por el alcohol y la lujuria, y te haré pagar las atrocidades que cometiste conmigo y con nuestra hija. Desde este mismo momento, y para toda la eternidad.
FIESTA
El matador mató al último toro de la tarde. Después recibió la ovación del excitado público. La multitud, enfervorizada, saltó a la arena y se abalanzó sobre él. El torero acabó muerto, aplastado por un marea humana que se asemejó por momentos a la embestida de un toro bravo.
(Con Otis Grand, guitarrista y cantante de blues)
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