Reseña de Yara Elizabeth Gordillo Cedeño publicada en la revista "Raíces de Papel":
Francisco José Segovia Ramos, granadino de nacimiento, es un escritor consolidado con una amplia trayectoria de participación en diversos certámenes literarios en los que ha sido merecedor de primeros premios y menciones de honor, quedando como finalista en muchos de ellos. Su actividad literaria le lleva a participar en múltiples ámbitos como revistas, programas de radio, periódicos o asociaciones en calidad de Miembro honorífico de la Maison Naaman pour la Culture y miembro colaborador de la Asociación Cultural Naufragio y de la Asociación “Apoloybaco” de Sevilla. En su trayectoria literaria, Segovia Ramos nos ofrece trabajos que pasan por todos los estilos: poesías, relatos cortos, cuentos, libros y artículos entre otros. “Lo que cuentan las sombras”, su segundo libro, es un claro reflejo de la continuidad de su compromiso con la vida y la muerte, entremezclando emociones tales como la alegría y la fatalidad. En este libro el autor presenta treinta relatos cortos en los que nos sitúa en el lado oscuro de la vida, en nuestros miedos, obsesiones, rencores y deseos de venganza, es decir, en todas nuestras “sombras”, que sin lugar a dudas son parte intrínseca de nosotros mismos. El primer relato es “La calle de atrás”. En él Segovia nos abre ese submundo característico que toda ciudad esconde en sus oscuras y descuidadas callejuelas, otra dimensión de lo humano que provoca en nosotros miedo y terror.
Esta “calle de atrás” no es más que una de las muchas calles que conforman nuestra existencia, y en la que guardamos nuestros miedos, obsesiones, vicios y desesperaciones. De vez en cuando dejamos que nuestros pasos nos lleven hasta ella, caminando por esa calle sin nombre, dejándonos perder entre sus sombras. En estas sombras es donde se esconden “los sueños negados, los anhelos imposibles, de posesión lejana e inalcanzable. Creación de imaginaciones desbordadas....”, tal y como lo plasma en su relato “Sombras”. Es en esas calles y sus “sombras” donde transitan todos los personajes de los relatos de Francisco José Segovia, a través de los cuales nos va desvelando sentimientos encontrados y ocultos, que sin temor él se atreve a sacar a la luz. En el relato “Lo intangible”, el autor recrea el sentimiento de venganza hasta sus últimas consecuencias, entremezclando el amor y el desamor, el rencor y el odio, la vida y la muerte. Cuanto más feliz es la pareja de Matilde y Pedro, más se llena el alma de Mateo de rencor y de odio, hasta que lo trasciende llevándole a matar y a terminar consigo mismo. El miedo a la muerte ha estado siempre latente en nuestro subconsciente, producto de las leyendas humanas. Un claro ejemplo de ello es el relato “La apuesta”, donde dos jóvenes mueren de miedo ante una aparición fantasmal como parte de un desafío para demostrar su valor. En el relato “Diez curvas”, unos padres reviviendo al año el accidente en donde perdieron a su hija Ani, experimentando la misma situación para paliar los reproches y culpas reconocidas, en el intento de buscar un camino que les reconforte la pena. Francisco José Segovia aborda también el miedo a la oscuridad y a lo desconocido, que nos puede llevar a desconectar de la realidad. Todo esto podemos observarlo en el relato “El sumidero”, donde Fernando se ve atraído por los misterios que se esconden tras una tapa que cubre un sumidero en su jardín. Animándose a bajar junto a Juan, el albañil, la curiosidad les llevará a recorrer un oscuro camino tras el que encontrarán finalmente la muerte en un ritual ancestral en las entrañas de la tierra. En nuestras sombras podemos vislumbrar también el eterno deseo de la vida después de la muerte, como en los relatos de “El lugar donde estoy” y “El Experto”, donde los personajes viven después de muertos y experimentan la sensación de ver su nombre escrito en una lápida y sentirse dentro de su nicho sin poder salir. Ambos están convertidos en seres de la noche sedientos de sangre. Del mismo modo en “Bella y fría como la muerte”, un hombre enamorado busca en el cementerio a su amada, enterrada ya hace unas semanas, deseoso de devolverle a la vida, sin embargo será finalmente él quien será llevado a la muerte. El autor conjuga por igual amor, obsesión, irrealidad y muerte en varias de sus historias, como ocurre en “El Sofá”, donde Yolanda ama al sofá de terciopelo azul turquesa, hasta la locura y el suicidio. En el relato que se titula, valga la redundancia, “El relato”, se vive una obsesión que lleva a un hombre hasta el suicidio, miembro de un jurado de narrativa, que siente atracción por un texto anónimo, perfecto y sugestivo. Así también en “Escalera al quinto piso”, el miedo va acompañado a la desconexión con la realidad, donde su personaje Paco, al escuchar ruidos en el piso de arriba, fantasea con monstruos y animales extraños. Francisco José Segovia recrea en algunos de sus relatos, situaciones donde los personajes son objetos o elementos de la naturaleza como en “La cajita de música”, “Horacio” y “El abetal”. Éstos asumen sentimientos de odio y venganza hacia las conductas humanas ya sea a la tala indiscriminada de árboles, o hacia la estafa en los negocios. Sin lugar a dudas, la muerte está presente en estas historias que llevan a las sombras a sus infortunadas víctimas .El autor en algunos de sus relatos expresa su manera de entender las sombras de lo humano, puesto que aunque nos inquieten forman parte de la existencia misma y no pueden ser entendidas sin la luz o el amor. Un claro ejemplo es la “Búsqueda”, donde María, una mujer sin sombra, se encuentra abocada a seguir buscando respuestas al abandono sufrido por la persona amada. Asimismo podemos verlo en el “Reencuentro”, donde se da una mezcla irracional de angustia y deseo incontrolable de contemplar el rostro de la persona amada, fallecida en un accidente. En la “Mecedora” de la abuela se expresa ese sentimiento de amor incondicional, de deseo desesperado de que no se despida de nosotros y continúe contándonos sus leyendas de brujas y fantasmas. En estos relatos Francisco José Segovia nos revela mitos, deseos ocultos, leyendas y creencias culturales que conforman nuestro pensamiento y en consecuencia, nuestras actitudes ante la vida y la muerte. Son nuestras “sombras” las que dibujan nuestra silueta real, en esos claroscuros de nuestra existencia
No hay comentarios:
Publicar un comentario