Otro relato mío aparece hoy publicado en el periódico digital Irreverentes.org:
https://periodicoirreverentes.org/2018/11/26/el-elixir/
lunes, 26 de noviembre de 2018
lunes, 19 de noviembre de 2018
Relato en el periódico digital Irreverentes.org
Otro relato mío aparece hoy en el periódico digital Irreverentes.org:
https://periodicoirreverentes.org/2018/11/19/el-plagio/
https://periodicoirreverentes.org/2018/11/19/el-plagio/
domingo, 18 de noviembre de 2018
Reseña: El Vínculo, de Ada de Goln, Pulpture Ediciones, 2018
UNA DELICIOSA HISTORIA DE TERROR
Dentro
de su colección Pulga (una serie de novelas cortas en formato bolsillo),
Pulpture ediciones ha editado la obra El Vínculo, de la escritora Ada de Goln,
precuela del magnífico e hipnótico corto de terror The Other Side, ganador del
Phonetastic 2013. Esto es ya de por sí una espectacular presentación.
Y,
en efecto, Ada de Goln no defrauda con su novela-relato larga, en la que no
solo nos cuenta qué paso antes de los hechos contados en The Other Side, sino
que da forma literaria al film e, incluso, va más allá de los hechos narrados
en él. Todo, por supuesto, en un ambiente gótico, como pide la historia.
Porque
El Vínculo bebe, clara y contundentemente, de la narrativa más clásica y
espléndida, con referencias claras al Drácula de Stoker, las novelas y relatos
de Mary Shelley, o las historias de Henry James. Su novela contiene elementos
referentes de lo mejor del género de terror; una mansión en mitad de ninguna
parte, una familia tranquila que es víctima de una ¿maldición?, paisajes
opresivos y bellos a la vez, lobos, aves nocturnas, pasos en las sombras… ¿Quién
no puede temblar ante la presencia de uno solo de estos elementos? En cambio,
Ada de Goln los utiliza todos, los mezcla, los agita suave, que no
violentamente, y nos presenta una historia que se lee de un tirón.
Estilo
gótico, sin florituras, sin excesivas cargas literarias, porque no las
necesita. La historia de los Morton, la familia protagonista de El Vínculo, no
necesita sino ser contada con maestría y cariño, sin recovecos innecesarios,
fiel al estilo del corto The Other Side, cuya estética impactaba e impacta
desde los primeros planos hasta el sorprendente y dramático giro final.
El
Vínculo es, por tanto, una delicada y deliciosa –en el sentido de agradable a
la lectura y el disfrute- obra del mejor terror, que sorprenderá más a quién no
haya disfrutado todavía del corto The Other Side, por desconocer la historia,
pero que, a quien haya visto la película no le defraudará un ápice, ya que
amplia y desarrolla la misma y aporta otra visión, o una visión desde otro
punto de vista, del film que ganó el Phonetastic de 2013.
Una
obra dignísima, bien acabada, donde cada personaje tiene su historia detrás y
ninguno sobra o es mera sombra que pasa y no deja huella. Ada de Goln
demuestra, con esta novela corta, que es capaz de manejar lo literario al mismo
nivel que lo visual, y eso, sabiendo que las historias de terror tienen que
contarse de forma muy diferente según qué medio se utilice para narrarlas, es
un éxito que tiene que apuntarse.
En
definitiva, El Vínculo viene de la mano de una escritora con muchos posibles,
con un gran futuro en el género del terror y, por ende, en cualquiera que se
proponga, por lo que habrá que esperar, más pronto que tarde, que Ada de Goln
nos vuelva a sorprender, bien sea en el mundo del cine como en el de la
literatura.
La obra El Vínculo forma
parte de la Biblioteca Pulga, colección de Pulpture Ediciones. Y el corto The
Other Side puede visionarse, entre otros sitios, en la página web: http://fibabc.abc.es/videos/other-side-4731.html
Más información en: http://pulpture.com/tag/ada-de-goln/
Francisco José Segovia Ramos
Noviembre de 2018
martes, 6 de noviembre de 2018
Relato: La Catedral Negra
LA
CATEDRAL NEGRA
Todas las iglesias y catedrales se construyeron sobre la
tierra, y se alzaron hacia el cielo, el reino de Dios. Los maestros canteros
tallaron las piedras, y esculpieron en ellas sus firmas, o símbolos
metafísicos. El resto de la humanidad contempló maravillada cómo se erigían aquellos
edificios, y las multitudes llenaron su interior para rezar y suplicar por sus
pecados.
Pero en un lugar desconocido de casi todos, escondida a
la mirada de la mayoría, una secta antigua como la misma existencia de la
civilización, edificó una catedral inmensa, muy diferente a las demás: se
construyó excavando en las profundidades de las tierras, de forma que su torre
campanario se encuentra en la sima más profunda de la construcción, y su
entrada está oculta bajo la inocente fachada de una pequeña gruta.
En esa catedral, que sus acólitos llaman “la catedral
negra”, celebran misas sangrientas y rezan cantos de ominosas melodías a su
único dios, al que ellos consideran superior al que ama y teme a la vez el
resto de los hombres: Lucifer, el ángel caído.
Cada solsticio de invierno, coincidiendo con la llegada
del invierno en el hemisferio occidental, celebran una magna misa, en la que
invocan sin descanso el retorno de su señor y la instauración de un nuevo
orden. Así ha sido desde el principio de los tiempos, aunque nunca han sido
respondidas sus plegarias.
Hoy, sin embargo, tras la misa del solsticio, el Caído se
ha aparecido a las varias docenas de fieles que lo adoran. Una llamarada ha
brotado del interior del altar invertido, y su mera presencia ha llenado de
fuego las estancias y de olor a azufre las fosas nasales de sus seguidores. Con
voz de trueno y mirada de fuego ha declarado a los allí presentes: ¡Hoy, amados
míos, empieza mi reinado!
Lo que como seguidor suyo declaro y afirmo horas después
del acontecimiento, a veintiuno de diciembre de dos mil doce: el fin del mundo
según el calendario maya, pero el principio del nuestro, por la gracia de
Lucifer, el Todopoderoso.
Francisco J. Segovia©Todos los derechos
domingo, 4 de noviembre de 2018
Reseña: Y bailar sobre tu tumba, de Ignacio Cid, Editorial Cazador de Ratas
NUNCA TE RÍAS DE UN ASOCIAL
No,
no nos referimos al autor de la novela, Ignacio Cid, un autor contundente y con
las ideas claras, sino al protagonista principal de Y bailar sobre tu tumba,
una novela de terror, con mucho de gore y de tensión escénica.
Y bailar sobre tu tumba engancha desde
las primeras líneas, algo fundamental en el género de terror. Lo hace porque
nos encontramos con un narrador que se dirige al protagonista y parece ajeno a
la presencia del lector. Todo un acierto narrativo.
La novela de Ignacio Cid se desarrolla
en nuestra cotidianidad urbana, con personajes adolescentes o inmersos en
estudios universitarios, con sus problemas, sus inquietudes y sus ansias
ocultas. No escatima en describir detalles truculentos o situaciones escabrosas,
y lo hace con la maestría de una pluma acostumbrada a ser usada con
flexibilidad literaria.
Porque eso tiene Y bailar sobre tu
tumba; mucha flexibilidad para ir de lo monótono a lo extraordinario, sin
perder el rumbo y con una tensión in
crescendo, imprescindible en cualquier obra del género que se precie. El
protagonista avanza en sus pesares y aspiraciones –muchas de ellas,
inconfesables-, enfrentándose a los demás personajes de la novela con mayor o
menor fortuna personal.
Los giros de tuerca, habituales en las
buenas obras creativas, aparecen puntualmente y sin forzar la historia. Un
vecino, una estudiante que comparte piso, unos crucifijos un tanto inestables,
una abuela del pasado que aparece de vez en cuando en los pensamientos del protagonista…
refuerzan la sensación de que algo puede suceder. Aunque, por supuesto, el
final no es el que se espera.
¿Qué, si no, pretende Ignacio Cid?
Pues eso, sorprender, divertir, entusiasmar al lector, hacerle releer de nuevo
la obra o no olvidarse de ella en mucho tiempo.
Con un estilo cercano, duro en
ocasiones, detallista, en otras, Ignacio Cid teje una trama hipnótica,
violenta, atrevida y rompedora. Su Y bailar sobre tu tumba, con ese final digno
de una buena película de Hollywood, nos deja con ganas de más.
No hay que preocuparse. Es seguro que
más pronto que tarde, Ignacio Cid volverá por sus fueros para reírse de
nuestros miedos y aspiraciones y, también, para aventarlos en las llamas del
infierno literario. El bueno, se entiende, que es en el que mejor se
desenvuelve.
Y bailar sobre tu tumba ha sido
publicada por la editorial Cazador de ratas, en el año 2018.
Más información en: https://lektu.com/l/librinde/reir-en-tu-funeral-y-bailar-sobre-tu-tumba/9275
Francisco
José Segovia Ramos
Noviembre
de 2018
viernes, 2 de noviembre de 2018
Revista Caños Dorados, 40-41, Fernán Núñez, Córdoba
Se ha publicado el último número de la revista Caños Dorados, de la asociación del mismo nombre, de Fernán Núñez, Córdoba, dedicada a los ganadores y finalistas de los certámenes de poesía y relato de 2018, entre los que me encuentro:
jueves, 1 de noviembre de 2018
Relato: Una jornada de trabajo en el siglo XXI
UNA JORNADA DE
TRABAJO EN EL SIGLO XXI
Suenan las sirenas de la fábrica: es la
hora de cambio de turno. Berta S. y Luis M. salen por las puertas del sector
cinco, tras catorce horas de trabajo, con una breve pausa de media hora para el
almuerzo. Se encuentran en la parada del metropolitano, se dan un ligero beso
en los labios, y toman juntos la línea siete, que los llevará hasta su modesto
apartamento, situado en una de las ciudades dormitorio que rodean al enorme
complejo fabril. En el trayecto de una hora apenas hablan, porque todo lo que
tenían que decirse está dicho, y las jornadas de trabajo se repiten con una
monotonía insufrible, amén del cansancio y el hastío. Pero no les queda otra.
Están casados desde hace dos años, y
tienen una hija de siete meses, que dejan en la guardería cuando se marchan al
trabajo, y a la que recogen cuando bajan del metropolitano. Apenas disponen de
un par de horas para besarla y disfrutar de sus gestos y de sus avances, porque
hay que acostarla pronto.
Ya en su hogar, y dormida la pequeña,
Luis M. enciende el televisor: en sus canales se repiten los mismos insulsos
programas de siempre, aparte de un partido de fútbol de tercera división y un
debate político, en el que sus contertulios insinúan un nuevo aumento de la
jornada laboral, o una bajada de salarios, o ambas cosas a la vez.
Berta S. se acerca a su esposo. Se
sienta junto a él y mira sin ver el televisor. Al poco rato murmura con
nostalgia:
—Añoro aquellos viejos buenos tiempos de
Abuelo, donde las cosas eran mejores…
Su esposo asiente con la cabeza. Él
también lo recuerda: parece que fuera ayer cuando Abuelo gritaba en las calles
contra las reformas del gobierno… y donde recibió la bala que lo mató, y acabó
al mismo tiempo con tantas ilusiones.
Pero eso fue hace muchos años, en el
2013. Ahora, veinte años después, le parece que el mundo que les rodea haya
retrocedido doscientos años.
Francisco J. Segovia©Todos los derechos
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